Aunque el saneamiento se realiza de forma regular, esto puede no ser suficiente para los equipos y superficies difíciles de desmontar o limpiar. La limpieza periódica intensificada puede servir para resolver estos problemas sin añadir pasos al programa de saneamiento diario.
La industria alimentaria se ha ido centrando cada vez más en un enfoque de la seguridad alimentaria basado en los riesgos. El control de la Listeria, en concreto, ocupa siempre el primer lugar de todas las listas, ya que representa la mayor amenaza. "La reciente afluencia del patógeno en una variedad de alimentos frescos, congelados y procesados está reforzando la importancia de comprender cómo se produce la contaminación en las plantas de procesamiento." (Mackin, 2018).
Tanto si los productores de leche crían sus propios terneros como si lo hacen por cuenta ajena, la salud de los animales es una prioridad absoluta. Los terneros sanos reducen los gastos veterinarios y las pérdidas por muerte, y garantizan la entrada en el rebaño de una novilla de reemplazo viable.
El desarrollo y la implementación de la Ley de Modernización de la Seguridad Alimentaria (FSMA) señala un esfuerzo concertado para mejorar la seguridad alimentaria en las plantas inspeccionadas por la FDA, e implementar algunas de las mismas estructuras y supervisión que se ven en las instalaciones inspeccionadas por el USDA.
Desde septiembre de 2016, la FSMA, la Ley de Modernización de la Seguridad Alimentaria, está en pleno vigor. Para los fabricantes de alimentos, las implicaciones de alcanzar el cumplimiento son inmensas. Uno de los componentes clave del cumplimiento es el requisito de controles preventivos. Aunque se trata de un tema amplio, se puede resumir en tres secciones: análisis de peligros, desarrollo de controles preventivos y, por último, gestión de los protocolos de control preventivo que se han creado.
"*" indica los campos obligatorios